sábado, 20 de diciembre de 2014

DIA 6 Mercadoiro - Vendas del Narón


Como de costumbre salí de noche, desde lejos se veía Portomarin, ya desayunaría allí. La noche nos confunde y en mas de una ocasión me costaría encontrar las flechas.
Portomarin es un lugar muy bonito que nació al borde del rio Miño, al
hacer el pantano de Belesar se comió parte del Portomarin antiguo y fue trasladado donde se encuentra actualmente, la iglesia románica de San Nicolás la desmontaron piedra a piedra para montarla arriba. Me encantan las iglesias románicas.



Pantano de Belesar

La iglesia de San Nicolás fue construida entre los siglos XII y XIII, con una tipología de iglesia-fortaleza. La fachada principal conserva sus características almenas por las que pasaba un camino de ronda y un impresionante rosetón calado enmarcado por un arco.

Por el camino conocí a unas chicas de Santomera que este era
también su primer camino, iban a Palas de Rei donde sabían que no iban a encontrar sitio pero eran aventureras y no tenían miedo a nada, por el camino vimos muchos hórreos característicos de Galicia (los asturianos son mas grandes y cuadrados), las acompañe hasta Vendas de Narón, allí nos despedimos, aunque nos volvimos a ver el día siguiente. La ruta era suave pero mis pies necesitaban descanso o cambiarlos por unos nuevos.

A las 12 estaba ya en el alberge y pude descansar lo que necesitaba, todos los días desde O Cebreiro hicieron frio, pero este fue el último. Habían 2 alberges yo fui a Ventas O Cruceiro en el otro se hospedaron una familia que conocería 2 días después (a veces de la sensación que todo esta comunicado con todo)
El alberge es bastante correcto, allí conocí a 2 italianos que mas adelante coincidiríamos en el mismo autobús de vuelta y a 2 ciclistas de Girona que se lo habían hecho entero con una media de 100 km al día.
A descansar que mañana iré a Melide a comer su famoso pulpo aunque me esperan 28 km por delante.